Welcome everybody

If you long for life, culture and especially the truth, I must let you into a secret; you need to look no further because you have found me, Alberto!
I can't promise you won't still be hungry and thirsty, but we can have some fun times together and it will give you something to remember.
Then tomorrow and beyond, you can reflect on what it is like to have a joyful day that in turn leads to a joyful heart.

Google Website Translator Gadget

lunes, 30 de agosto de 2010

DOS NIÑOS INTERRUMPIDOS

El doctor Agustín Losada, en su blog Bioética hoy, ha facilitado un video de 7 minutos de duración que vale la pena ver. Aunque está en inglés, las imágenes son elocuentes y suficientemente expresivas. Uno de los fetos corresponde a un niño de 14 semanas, tiempo en el que la Ministra de Igualdad manifiesta que hablar de ser humano entonces no tiene base científica. Las imágenes hablan por sí solas.



Como dice Agustín en su blog: "Estos dos bebés fueron abortados mediante el método de provocar contracciones con prostaglandinas a la madre. Estas fuertes contracciones erosionan la piel del bebé, que por eso aparece en algunas zonas con un color más negruzco, y como resultado se produce un parto prematuro. En ocasiones los bebés nacen vivos, y hay que dejarlos morir. Pueden sobrevivir en agonía desde unos minutos hasta algunas horas".

Después de ver estas imágenes, difícilmente puede justificarse que el derecho de elección de unas personas pueda primar sobre el derecho a la vida de otros. No olvidemos que en este negocio hay mucho dinero: 1.655 euros es lo que cuesta un aborto de 22 semanas en la Clínica Isadora de Madrid. Afortunadamente, son muchos los médicos que se niegan a practicar un aborto. El 69% de los ginecólogos italianaos son objetores de conciencia y no practican abortos. Es Italia uno de los paises con más médicos acogidos a este derecho profesional: nadie puede estar obligado a actuar en contra de su conciencia.

viernes, 27 de agosto de 2010

UNA AUTORA MULTIFACÉTICA


Nuestro amigo Angel Sancho, seguidor infatigable de bioeticaylibros, me envía la siguiente entrada. Desde aquí, sólo me queda agradecer a Angel su afecto a la buena literatura, de la que nos hace partícipes.

Doctora en Economía y en Filosofía, profesora de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Navarra, madre de familia numerosa, y ¡autora de novelas! Se trata de Reyes Calderón. Hasta la fecha he leído de ella “Los crímenes del número primo” (RBA) que ha sido un éxito de ventas y “El expediente Canaima”, de la misma editorial. Es de esta novela de la que quiero hablaros hoy.

La juez del Tribunal Superior de Navarra se enfrenta a su último caso antes de su traslado a la Audiencia Nacional. Se trata de la violación de una adolescente a manos de un peligroso narcotraficante. Paralelamente, un alto dirigente del Banco Mundial la involucra en una complicada trama de corrupción internacional, que se extiende desde Venezuela a Madrid. Y no podía faltar un inspector de la Interpol. Es Juan Iturri. Ni tampoco el FBI. Entre todos ellos comienzan los pasos para buscar a los responsables. A medida que la juez se acerca a la verdad, la vida de su familia está amenazada, por lo que se verá obligada a tomar una difícil decisión: o ceder al chantaje o poner al descubierto a los culpables.

Historia de amor y lealtad, thriller, reflexión. Todo ello en proporciones para “engancharte” cuando la comiences a leer, así que…¡hazlo ya!

Ha escrito también las novelas: “Ego te absolvo”, “Gritos de independencia” y la que tengo especial deseo de leer: “Las lágrimas de Hemingway” (trama policiaca en medio de las fiestas de San Fermín…ya os contaré más cuando la lea…¡pero sin “chafar” el argumento, of course…¡eso nunca!

jueves, 26 de agosto de 2010

LA EUTANASIA Y LOS JÓVENES


Mi amigo Jesús me envía este correo, que no tiene desperdicio.

"Anoche mi madre y yo estábamos sentados en el salón hablando de las muchas cosas de la vida... entre otras... estábamos hablando del tema de vivir/morir. Le dije: 'Mamá, nunca me dejes vivir en estado vegetativo, dependiendo de máquinas y líquidos de una botella. Si me ves en ese estado, desenchufa los artefactos que me mantienen vivo. PREFIERO MORIR'.

¡¡Entonces, mi mamá se levantó con una cara de admiración ...Y me desenchufó el televisor, el DVD, el cable, Internet, el PC , el mp3/4, la Play Station , el teléfono fijo, me quitó el móvil, la ipod y me tiró todas las cervezas!!! ¡La madre que la parió!!..."

Sin comentarios.

martes, 24 de agosto de 2010

EL ACUERDO BILL AND BILL (CLINTON Y GATES)


En la reciente 18º Conferencia Internacional contra el Sida, resulta que Bill Gates y Bill Clinton ahora descubren, aceptan y piden promover, en la lucha contra el Sida,lo que ya muchos sabíamos eficaz: la abstinencia sexual y la fidelidad a la pareja. Sorprendente. Nunca es tarde para cambiar, ¿verdad?

Clinton y Gates coinciden en que "se malgastan los recursos contra el Sida, y afirman que la mejor estrategia y la más barata es la prevención, fomentando políticas basadas en una conducta sexual responsable." Ambos han coincidido en afirmar que la enfermedad requiere el desarrollo de políticas de prevención que se basen más en la conducta y no tanto en el envío masivo de preservativos y contraceptivos”.

Relaciones sexuales más tardías, evitar la promiscuidad y fomentar la fidelidad, tres cambios en la conducta de los jóvenes que han reducido espectacularmente el VIH en varios paises de África. Ya mucho antes, las pautas reconocidas como las más fiables a la hora de evitar el contagio con el VIH eran las promovidas por la OMS y conocidas como el “ABC”(Abstinencia, Fidelidad a la pareja y –para los incapaces de vivir ese A o B- condones). Ese ABC fue divulgado por la revista médica The Lancet ya en 2004, pero la debilidad moral de tantos médicos, periodistas y políticos y el dinero fácil y generoso para acallar conciencias sigue silenciando lo que es eficaz y ocultando lo que es políticamente incorrecto.

Pero el negocio mundial y millonario de repartir condones y la mentalidad de considerar la fornicación “protegida” como un derecho y una conquista cultural responden siempre con agresiones descalificadoras a los que se atreven a decir la verdad. Por eso cuando el Papa insinuó discretamente que el cambio de conducta sexual era de gran importancia en la lucha contra esta pandemia, sufrió un “linchamiento mediático y político” de alcance mundial.

Pocos le defendieron, pero Edward Green, el máximo experto en Sida de la universidad de Harvard, sí tuvo el valor de decir que Benedicto XVI tenía razón y que en su larga experiencia comprueba que existe “una relación entre una mayor disponibilidad de preservativos y una mayor tasa de contagios de Sida”.Los hechos confirman las tesis de Green. Ahora, siguiendo programas semejantes al de Uganda, Boswana, Costa de Marfil, Etiopía, Kenia, Malawi, Namibia, Zimbawe, Senegal y otros, han podido reducir fuertemente el impacto del Sida en su población.">El Sida es sobre todo una enfermedad comportamental.

“Los jóvenes han demostrado que pueden ser agentes del cambio en la revolución de la prevención”, firma un informe de Naciones Unidas que insiste en que “un cambio está ocurriendo en la gente joven de todo el mundo, especialmente en partes del África subsahariana”.

Y nosotros, mientras tanto ¿qué? ¿Como siempre? ¿Con varios años de retraso? ¿Todavía somos tan estúpidos como para seguir creyendo en la “salud sexual y reproductiva”? ¿tan cobardes, mercenarios o sinvergüenzas, como para seguir difundiendo condones entre nuestros jóvenes?

martes, 17 de agosto de 2010

INTERRUMPIR LA CONCIENCIA


Todos estamos de acuerdo con que la conciencia es algo muy personal, que todos debemos respetar. Todos debemos obrar en conciencia, y a nadie se le debe obligar a actuar en contra de la conciencia. Es este respeto a la conciencia propia y ajena algo básico en las relaciones interpersonales. Si no lo respetamos, nuestro círculo de conocidos se irá estrechando y nos quedaremos al final sólo rodeados de un grupo de amigos con ideas afines a nosotros.

Similarmente, una sociedad que no respete la conciencia de sus ciudadanos está condenada a ser conflictiva, porque le falta el respeto y la tolerancia a las opiniones ajenas. Como muy bien apunta Esteban Rodríguez, ginecólogo "algunos políticos se creen en la obligación de regular las conciencias de los ciudadanos. Deben pensar que la conciencia no es algo íntimo de la persona sino que de alguna manera es patrimonio de la casta política que dirige el Estado". Pero es la conciencia un acto de la razón práctica, es un juicio sobre un acto singular, que corresponde al individuo, al ciudadano, nunca al Estado.

"¿Por qué es tan importante que el Estado se meta en la conciencia de los agentes sanitarios y no en la de otros agentes sociales?" se pregunta el doctor Esteban Rodríguez. "La respuesta es fácil, se debe a que la clase política es consciente de qué está dictando leyes contrarias a la deontología médica que atentan contra la conciencia profesional de los médicos, de los farmacéuticos, enfermeros y demás profesionales relacionados con el ámbito sanitario".

Algunos políticos deben creer que "el celador que conduce a una mujer a quirófano para que su hijo le sea arrancado de sus entrañas, o la enfermera que hace el preoperatorio, el administrativo que hace los trámites, el ginecólogo que hace la ecografía, la orden ingreso y informe el alta etc., son ejecutores autómatas sin ciencia ni conciencia". No, el Estado no es el dueño de la conciencia, puesto que la conciencia es el centro más íntimo de la persona. Si esto se olvida, caeríamos en un totalitarismo absurdo.

"La solución, por tanto, no pasa por poner un interruptor a la conciencia y decirles a los médicos qué puede atentar contra su conciencia y qué no, en un paternalismo político intolerable". La conciencia ni se puede interrumpir, ni se puede suspender, ni se puede regular. Es algo que pertenece a la esfera de lo privado, que siempre debe ser reconocido.

jueves, 12 de agosto de 2010

EL PAPEL DE LA MUJER


Resulta que un comité de la Organización de las Naciones Unidas que, entre otras cosas, promueve el aborto ha concluido sus sesiones la semana pasada atacando a la maternidad y a los roles sexuales tradicionales, y ha exigido un despliegue cada vez mayor de nuevos derechos sexuales y reproductivos para las mujeres.

El comité, que supervisa la implementación de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (conocida como CEDAW, por sus siglas en inglés), está compuesto por 23 especialistas «independientes».

En esas sesiones, el grupo de representantes de la Federación Rusa destacó ante la CEDAW un nuevo programa del Ministerio de Salud de dos años de duración, que se centra en la prevención del aborto y la protección de la vida. La delegación rusa informó que, por primera vez en décadas, el índice de nacimientos excedía al de abortos y que «el número decreciente de abortos también está disminuyendo los índices de mortalidad materna tras nacimientos o abortos».

Mientras tanto, el especialista cubano advirtía acerca de los estereotipos sexuales negativos que podría traer aparejado el que las mujeres fueran vistas sólo como «buenas madres, buenas esposas y cuidadoras, mientras que los hombres fueran considerados como el sostén económico". El experto holandés preguntaba a la delegación rusa si su legislación contemplaba la discriminación contra las mujeres lesbianas, bisexuales y/o transexuales. El especialista tailandés preguntaba al representante de Fiyi si podría proponer la despenalización de la prostitución para l@s trabajadores sexuales adult@s.

Ante la preocupación del Comité por el hecho de que el gobierno ruso promoviera la maternidad y que las mujeres pudieran quedarse en sus hogares con sus recién nacidos, en vez de facilitar su rápido retorno al trabajo, la respuesta de la Federación Rusa ha sido contundente: la disminución en los índices de aborto está contribuyendo a reducir los índices globales de mortalidad materna en su país. Y en España, tenemos crisis de todo, menos de aborto, 16.000 en el primer mes de aplicación de la nueva ley de aborto. Todo un record, que proyecta casi 200.000 abortos anuales. Quién había dicho que con la nueva ley iba a disminuir el número de abortos?

viernes, 6 de agosto de 2010

NO ES PAÍS PARA VIEJOS


Cormac McCarthy, en su gran novela “No es país para viejos”, pone en boca del sheriff Bell estas palabras: “Y ella venga a hablar. Al final me dijo: No me gusta a donde va este país. Yo quiero que mi nieta pueda abortar. Y yo le dije, mire señora, tal como yo lo veo no me cabe duda de que su nieta podrá abortar. Es más, creo que además de abortar también podrá hacer que le practique a usted la eutanasia. Lo cual puso fin a la conversación”.

Me impresionó al leerlo: el sheriff Bell tenía razón. La sociedad que hace excepciones al derecho a la vida, termina arrollando incluso a sus autores. Y no me estoy refiriendo sólo a la evidente relación entre aborto y eutanasia. Me refiero a que lo que hace cada ciudadano repercute –para bien o para mal- en toda la sociedad: Todos nos hacemos mejores o peores con la conducta de los demás.

Me ha venido a la cabeza la novela de McCarthy al recibir hoy una buena noticia. Está relacionada con el viaje que hice hace unas semanas con varios amigos desde Cantabria a Tordesillas para asistir a la inauguración de CIDEVIDA (Centro Internacional para la Defensa de la Vida humana). Una de las personas que asistieron estaba embarazada y previamente había tomado la decisión de poner fin a un embarazo que juzgaba inoportuno. Hoy me han dado la noticia de su decisión de ser ayudada por RedMadre y seguir adelante con el niño. Cito este ejemplo concreto porque tengo la convicción de que en su decisión ha influido más que las razones científicas que allí vio y oyó (siendo estas muy importantes), las sinceras sonrisas y sentir un apoyo desinteresado y real. ¡Enhorabuena a ella y a CIDEVIDA!

Este es el texto de la carta publicada en El Mundo, edición de Cantabria. Su autor es el mi amigo Angel Sancho Crespo, Doctor en Medicina y Cirugía. Gracias, Angel. Por cierto, el libro es duro, duro, duro, como un puñetazo en el estómago.