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Veintitres años en coma, y ha salido. Rom Houben sufrió un accidente automovilístico en 1983 y los médicos lo declararon en coma irreversible. Hace tres años, "volvió a nacer" gracias a que un chequeo especial reveló que tenía el cuerpo paralizado pero su cerebro funcionaba casi totalmente. Estuvo 23 años en coma, pero él escuchaba todo, aunque no podía moverse.
Hoy Houben, de 46 años, se comunica con la ayuda de un teclado especial. Manifiesta la impotencia de todo este tiempo para intentar decir a sus médicos y enfermeras que no perdieran la esperanza de sacarle adelante. "Yo gritaba, pero nadie me escuchaba" teclea en su ordenador especial.
En gran parte de los casos de diagnóstico de estado vegetativo, un estudio más exhaustivo revela signos de consciencia. Un equipo de investigadores advierte que el diagnóstico de coma profundo yerra en muchos casos; por lo que habría que distinguir entre el paciente en estado vegetativo (EV) y el que se encuentra en "estado mínimamente consciente" (EMC). En EV, los reflejos están intactos y el paciente puede respirar sin ayuda, pero no existen indicios de conciencia. El EMC consciente es en cambio una condición más difusa, en la que algunas personas pueden experimentar alguna emoción e incluso encontrar el modo de comunicarse. También cabe aplicar el principio de en caso de duda razonable, y mantener una posición favorable a la protección de la vida.
2 comentarios:
El caso que traes a cuenta me fue de gran interés cuando en una clase de bioética analizábamos lo referente a la muerte cerebral...Saludos!
Supongo que algunos dirán que los 23 años fueron horribles para él, y que más le valdría que le hubieran "eutanasiado" antes. Es lo que pasa cuando se decide que alguien es humano cuando tiene características, no esencia.
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