Otra confusión en el laboratorio de Fecundación in Vitro. Esta vez en Singapur. Una mujer china de Singapur y un hombre blanco han descubierto que su bebé FIV tenía un tipo de sangre diferente a cualquiera de ellos. Una prueba confirmó que el bebé comparte el ADN de la madre, pero no el del padre. El Dr. Cheng Li Chang, director médico del Centro de Fertilidad de Thomson, se disculpó, aunque insistió en que dicho centro cumple todos los requisitos reglamentarios, y éstos son de lo más altos exigente.
Se trata del primer caso de este tipo que ha salido a la luz en Singapur, pero es imposible saber si se trata de un error muy común. Casos similares sólo saltan porque el niño es muy diferente a los padres. En cualquier caso, la pareja dice que van a mantener al niño.
Mientras tanto, en España la televisión pública emitía en el telediario de máxima audiencia la noticia de un avance científico de auténtico pavor. Una máquina que graba los primeros días de la vida de un niño, en estado embrionario claro. Mediante el EmbryoScope, se puede realizar un auténtico cribado embrionario, que permite seleccionar los embriones que se van a implantar.
En este caso se obtuvieron seis embriones. De los cuales sobrevivieron cinco, y de ellos se transfirieron a la madre dos, y tres se guardaron en nitrógeno líquido, reservados por si acaso para futuras ocasiones. Los padres muy felices de haber conseguido por fin al pequeño Juan, pero sin comentario alguno acerca de los 10 o 15 niños que han tenido que morir para que Juan existiese. No olvidemos que antes de recurrir a este nuevo método habían tenido un intento FIV.
Y todo esto contado con la máxima naturalidad no sólo por los padres, sino también por el Director de la clínica. Un nuevo método de selección embrionaria, que con una lógica absolutamente utilitarista, decide quien tiene derecho a vivir, y quién debe pasar a engrosar la cifra de los anónimos embriones sobrantes. Una vez más, el diagnóstico genético preimplantatorio se convierte de hecho en una tecnología eugenésica.
1 comentario:
Entre las técnicas de fecundación y los reglamentos del Registro civil, los niños tendrán cada vez más difícil saber quienes son sus padres.
Publicar un comentario