Zenit entrevista a Helio Oliveira, graduado del Máster,
esta vez en castellano. Son especialmente interesantes las últimas preguntas,
que se refieren a tópicos sobre la relación fe-razón en el campo de la bioética,
y sobre el papel de la enseñanza cristiana en bioética.
En la entrevista, se aborda la importancia de la bioética en nuestros días, saliendo al paso del relativismo que nos circunda. Este es algún extracto de la entrevista:
"Algunos dicen: “mira, esto son cuestiones de fe, ustedes
tienen fe; creen que la vida comienza aquí…por tanto esto es la fe de
ustedes, pero no me impongan sus criterios religiosos y de fe al hablar
de estos temas, que son cuestión de conciencia personal. Si yo creo que
está bien…está bien, para qué me vas a imponer tú una idea tuya”. ¿Qué
respondemos a esto?
- P. Luciano: Pues que hay un nivel que es cuestion de fe, sin duda,
pero hay un nivel que es de naturaleza humana. Es decir, por ejemplo,
¿por qué la gente se enoja cuando ve a un chico ser agredido? No se
enoja porque es católico o no va a decir que no ha agredido por ser
católico, porque esos son mis valores... No, es porque es algo de
naturaleza humana, porque existe algo en la naturaleza humana que dice
“esto no está bien”. No queremos imponer, pero queremos que las personas
tengan conciencia de lo que son. No puedo decir: “yo quiero volar...”
Tenemos una libertad, lógico, pero esta libertad no llega al punto de
decir que podemos cambiar nuestra naturaleza, o sea, no podemos
comportarnos como animales si somos seres humanos, y si somos seres
humanos, hay uno modo humano de comportarse, y es en este nivel en que
la Bioética trabaja".
No es fácil explicar a la gente en qué consiste la Bioética, se trata de una ciencia nueva. No todo es bioética, pero está claro que muchas de las cuestiones de actualidad que se plantea el hombre y la mujer de la calle pueden resolverse aplicando criterios bioéticos que salvaguarden la naturaleza humana. Temas como la investigación con células madre, el diagnóstico prenatal, el suicidio asistido, el transplante y tráfico de órganos, por citar sólo algunos pueden resolverse con ayuda de la Bioética.
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