Ha sido impresionante el revuelo que se ha armado en torno a las palabras que dijo el Papa antes de llegar a Camerún. Políticos de algunos países europeos, leáse España, Francia, Bélgica han puesto el grito no precisamente en el cielo, escandalizados de las palabras de Benedicto XVI. Un amigo mío me enviaba desde Victoria (Canadá) toda una página en la que se culpaba a la Iglesia nada menos que de la propagación del sida en Africa.
Durante el vuelo de Roma a Yaundé, el martes 17 de marzo por la mañana, el Santo Padre respondió a varias preguntas de los periodistas. Philippe Visseyrias de France 2, le preguntó: Santidad, entre los muchos males que afligen a África, destaca el de la difusión del sida. La postura de la Iglesia católica sobre el modo de luchar contra él a menudo no se considera realista ni eficaz. ¿Afrontará este tema durante el viaje?
Respuesta del Papa: "Yo diría lo contrario: pienso que la realidad más eficiente, más presente en el frente de la lucha contra el sida es precisamente la Iglesia católica, con sus movimientos, con sus diversas realidades. Pienso en la Comunidad de San Egidio que hace mucho, visible e invisiblemente, en la lucha contra el sida, en los Camilos, en tantas otras cosas, en todas las religiosas que están al servicio de los enfermos... Diría que no se puede superar este problema del sida sólo con dinero, aunque éste sea necesario; pero si no hay alma, si los africanos no ayudan (comprometiendo la responsabilidad personal), no se puede solucionar este flagelo distribuyendo preservativos; al contrario, aumentan el problema. La solución sólo puede ser doble: la primera, una humanización de la sexualidad, es decir, una renovación espiritual y humana que conlleve una nueva forma de comportarse el uno con el otro; y la segunda, una verdadera amistad también y sobre todo con las personas que sufren; una disponibilidad, aun a costa de sacrificios, con renuncias personales, a estar con los que sufren. Éstos son los factores que ayudan y que traen progresos visibles".
En Yaundé, Camerún, en 1993, se celebró la VII Reunión Internacional sobre el Sida con expertos médicos y sanitarios. Fue una reunión en la que participaban unos trescientos congresistas y, se distribuyó al final, un cuestionario para que se indicase, entre otras cosas, si se había tenido relaciones sexuales durante los tres días que duró la reunión con personas que no fuesen pareja estable. De los encuestados, el 28% contestó que sí, y de éstos, una tercera parte dijo que no había tomado "precaución" alguna para evitar contagios. "Después de esto, todavía algunos estigmatizan a la Iglesia como la culpable del sida en el mundo?
1 comentario:
Pues yo no sé que ven de malo en las palabras del Papa. No creo que sean motivos de escándalo. Solo el diablo se escandaliza cuando se dice la verdad.
Luego que se critique la postura de la Iglesia cuando no se es de la Iglesia y no hay por qué acatar sus mandamientos también me causa perplejidad. ¿Qué más les da lo que diga la Iglesia si ellos no lo van a cumplir de todas maneras, si no son católicos o siéndolo no practican?
¡Anda que...! ¡Animar a la fidelidad con la pareja! ¡Qué barbaridad, en estos tiempos! (ironía, claro)
Creo que era Uganda el país en el que el sida ha retrocedido por seguir una política similar a la de la Iglesia, pero no estoy seguro.
Por otro lado me consta que las enfermedades de transmisión sexual aumentan mucho entre nuestros jóvenes, y me encantaría un estudio estadístico al respecto. Que no será el sida, pero hay muchas otras enfermedades que eran marginales y empiezan otra vez a galopar, a pesar -o por culpa- de tanto preservativo.
Un saludo
Un saludo
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