Hace poco, mi amigo José Luis, del que tanta bioética he aprendido y la que me queda por aprender, ha adoptado una niña de Ucrania. Han sido años de esfuerzo, ahora la niña ya está viviendo aquí, en Valladolid y toda la familia encantada. Son muchas las familias que deben recurrir a la adopción en China, Rusia o distintos países de América, porque en España no hay niños adoptables.
Se produce en España una curiosa paradoja: mientras se sitúa a la cabeza de Europa, con más de cien mil abortos al año, puede presumir de ser el país con la tasa de adopciones internacionales más alta, con cais trece niños traídos de fuera por cada cien mil habitantes. Es muy fácil acabar con la vida de los no nacidos y, al mismo tiempo, es enormemente complicado adoptar en España.
Por eso, es muy de agradecer la iniciativa de la Generalitat Valenciana, para agilizar los trámites de la adpción, y convertirlo en alternativa a las interrupciones de los embarazos. Para poner en marcha el proyecto Más vida, que es como se denomina esta iniciativa, cuatro consejerías han unido recursos y esfuerzos, con un plan ambicioso de medidas económicas y sociales para apoyar la maternidad. Una de las inciativas ha sido la creación de una red de familias voluntarias que acogerán a mujeres embarazadas con escasos recursos.
La idea es buena y ojalá tenga éxito. Como lo ha tenido la Plataforma HazteOír que, en sólo dos semanas, reunió más de 10.000 compromisosos de adopción para niños que vayan a ser abortados.
Por: Alberto García Chavida
1 comentario:
Es una idea genial y desde luego una alternativa al aborto discriminado y digo discriminado porque esto se parece a las prácticas eugenesicas que se intentaron en varios periodos de la edad moderna con la obsesión de "mejorar" la raza. Esterilizaban a hombres y mujeres por el mero hecho de tener alguna enfermedad, malformación o simplemente personas poco agraciadas. La locura de estas prácticas conmocionó de lleno a la mayoría de científicos, filósofos y políticos de la época y lograron erradicarlas. En nuestros tiempos hay mentes enfermizas que siguen pensando que estos métodos de limpieza étnica deberían existir. El aborto en sí mismo forma parte de un modo de exterminio tan velado con justificaciones a veces tan demenciales e incomprensibles que realmente da que pensar que aquí esta ocurriendo algo serio y que se nos esta yendo de las manos. Volviendo al enunciado, cuando a una parturienta se le plantea la idea de que cuando nazca su hijo le tiene que dar en adopción seguro que se niega y al final tiene a su hijo y pasa de abortar. Veamos por qué puede ocurrir esto, primero si a las premamás se les contara la verdad de lo ocurre después de abortar se lo pensarían dos veces, a saber, afloran problemas psicológicos y físicos. A nivel cognitivo porque emocionalmente se siente remordimientos de no haber tenido ese hijo, el sentimiento de culpa moral durará años, los recordatorios de fechas clave de cuando se cometió etc. todos estos reflejos desembocan en cuadros de ansiedad, depresión, baja autoestima, ni que decir tiene las imágenes representativas, pesadillas aterradoras, total un cuadro de patologías innumerables. No hay duda que el aborto provoca graves tensiones en la mujer y en algunos casos aparecen años después. Amigos acallar la conciencia es sumamente complicado y los asesinos lo reconocen. Bien iba con lo de las adopciones, eso de que te digan: oye mira ten tu hijo y luego no le volverás a ver porque crecerá dado en adopción, ufff , es duro, al final pasa como cuando aborta, afloran las reacciones psicológicas anómalas de las que hablaba y el efecto es el mismo. La mujer posee un instinto materno dado por la misma naturaleza. Violentarlo significa acumular traumas que a veces se manifiestan poco después, pero en otras ocasiones quedan latentes y explotan años más tarde, en las formas más inesperadas. Pero de todos modos la idea es genial y seguro que se evitaran muchos abortos.
Al Icarus
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