Una lectora o lector anónimo, con insomnio profundo (por eso me lee), pedía algo más sobre Cuidados Paliativos. Intentaré aclarar algunos conceptos. Si lo consigo, que se ponga en contacto conmigo y ya veremos la forma de celebrarlo.
La misión principal del médico es curar y, cuando ya no se puede curar, cuidar y aliviar. La Medicina Paliativa se basa en un tipo especial de cuidados que se aplican a pacientes en situación de enfermedad avanzada. Lo que se pretende con estos cuidados es que los enfermos y sus familiares tengan la mejor calidad de vida, adecuada a su situación. Para que funcionen bien, se requiere el trabajo en equipo de profesionales médicos, personal de enfermería, psicólogos y trabajadores sociales.
Desde determinados ambientes políticos, hay un interés por posicionar los cuidados paliativos al mismo nivel que la eutanasia, se pretende de alguna forma equiparar los cuidados paliativos con la sedación terminal. El anteproyecto de ley de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía va en esa línea, desprestigiando los cuidados paliativos, por la obsesión de no caer en la aberración del encarnizamiento terapéutico. Según han manifestado varias Colegios de Médicos y la Asociación Española de Bioética y Etica Médica, es una ley totalmente inútil, pues ya el Código de Etica y Deontología Médica contemplan todos los supuestos distintos de pacientes.
Respecto al encarnizamiento terapéutico sólo decir que se trata de una práctica rechazada por los profesionales médicos. Es tratar a la persona como a un perro. Es curioso, pero en Italia ese tratamiento se llama acanimento, que viene de la palabra cane, que significa perro. No procede plantear lo que es una mala praxis como algo generalizado, sencillamente porque es falso. Y es grave presentar al médico como un profesional del que se debe desconfiar, cuando la confianza es básica en la relación médico-paciente.
Lo que se necesita es informar mejor a los ciudadanos de lo que son los cuidados paliativos: ayudar a vivir lo mejor posible los días que queden, y a morir con dignidad, no como un animal.
Si hay que administrar analgésicos para aliviar el dolor, a por ellos que para eso están, pero sin caer en la solución fatal de despachar a unos pacientes que ya no resultan productivos. Y junto a eso se necesita una mayor inversión en formación y recursos humanos y técnicos para poder ofrecer a todos los que los precisen los cuidados paliativos, una medicina científica, avanzada en los últimos años, necesaria y competente.
3 comentarios:
Sólo añadir, que para el médico es mucho más cómodo (da menos quebraderos de cabeza) encarnizarse y/o olvidarse del enfermo que tratarle en cuidados paliativos.
Muchas gracias Alberto por atender de manera tan rápida mi petición con este tema (como puedes ver soy tu lector anónimo). Creo que has hecho un resumen muy concreto y claro de la situación. Me recuerda la tema de la abstinencia: no conviene difundirlo porque implica el trabajo -como tú bien dices- de todo un equipo de psicólogos, enfermeras,...que son innecesarios en el caso de la eutanasia. Y además en la eutanasia "parece" que uno manda, al igual que con el abosto y los preservativos...gracias de nuevo y continúa contándonos cosas.
Carlos: Como muy bien sabes y habrás experimentado en tu práctica, no siempre lo más cómodo es lo más ético.
Al
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