Bélgica es el segundo país que legalizó la eutanasia en 2002, con una ley más permisiva que la de su vecina Holanda. En Bélgica, pacientes no terminales y personas que padecen un insoportable sufrimiento psíquico pueden también pedir la eutansia a su médico. En caso de que el paciente no sufra una enfermedad incurable, el médico deberá tomarse un mes de reflexión y pedir el consejo de dos colegas.
Ahora un informe de Herman Nys, profesor de Derecho Médico en la Universidad Católica de Lovaina, asegura que la eutanasia se está convirtiendo en un tratamiento normal exigido por los pacientes.
Según la ley, no existe derecho a la eutanasia en cuanto tal, pero en la práctica se habla a menudo de la eutanasia como de un derecho y se exige la misma.
Según la ley, debe ser aplicada por un médico. En la práctica, son a menudo los enfermeros los encargados de realizar el trabajo sucio.
Según la ley, la petición de eutansia debe ser formulada con plena conciencia por el paciente. En la práctica, son a mudo los familiares, los hijos y a veces los nietos quienes exigen la eutanasia.
Según la ley, la petición debe ser realizada por escrito. En la práctica, basta una petición oral.
De esta forma, por esta pendiente resbaladiza, se evoluciona lenta pero seguramente hacia una situación en la que la eutanasia se considera un tratamiento médico normal. Algunos están empeñados en hacernos creer que la eutanasia forma parte de los cuidados paliativos que se ofrecen al paciente y nada más alejado de la realidad.
También en Oregón, donde está legalizado el suicidio asistido, pasa algo similar. El año pasado se informó de que las autoridades negaron tratamiento para su enfermedad a algunas personas enfermas terminales y, por el contrario, se les ofreció el suicidio asistido.
A la vista de lo sucedido en Holanda y en Bélgica, da toda sensación de que toda ley de eutanasia es, por su propia inercia, absolutamente incontrolable. Existe alguna posibilidad de una ley de eutanasia que se cumpla realmente? Invito a mis lectoras y lectores a expresar su opinión, pues de verdad que no lo tengo nada claro.
1 comentario:
Albert, que se te está pegando la forma de hablar socialista ("a mis lectoras y lectores")... jajaja ;)
Claro que es incontrolable, se empieza con los enfermos terminales, pero algunos dicen, ¿y yo que tengo a mi padre aquí, que no es enfermo terminal pero me está haciendo gastar un pastón en medicamentos, y total, ya sólo molesta y al final acabará muriendo, por qué yo no puedo aplicarle la eutanasia? Y se acabará extendiendo a padres con hijos retrasados que ya estén hartos de cuidarlos "sin que sirva para nada", y Dios sabe que más cosas se llegarán a hacer...
Lo mejor es que no existan estas leyes, y en el caso de que se produzcan situaciones especiales, que quizás la ley deje una puerta abierta para que se estudie el caso en particular. Pero sólo en casos en los que la persona esté mas muerta que viva y esté sobreviviendo a base de aparatos, sin que exista posibilidad de recuperación.
No sé, ésto es lo que pienso yo, tampoco es algo que tenga muy claro ni sé cual es la postura de la Iglesia.
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